UNA GRASA LUBRICANTE DURADERA QUE HACE QUE LAS RÓTULAS MECÁNICAS DE SIDEM. SEAN LAS MÁS RESISTENTES DEL MERCADO DE PIEZAS DE REPUESTO.

Lubricar las rótulas mecánicas es esencial para evitar que se sequen, corroan y desgasten. La grasa empleada en las piezas de Sidem, diseñada en colaboración con Klüber Lubrication, garantiza una vida útil mucho más larga gracias a un movimiento más suave y a la protección frente a la filtración de agua. Sidem siempre diseña sus piezas con la máxima vida útil, la mayor seguridad y la mayor comodidad posibles en mente, así como teniendo en cuenta que sean fáciles de instalar.

 

Vida útil más larga

El principal motivo por el que fallan las rótulas mecánicas es la corrosión causada por la filtración de agua. Sidem adopta una serie de medidas para evitarlo. La primera es el uso de materias primas resistentes: p. ej., acero al cromo forjado en frío y pulido para el perno. Este material aporta más fuerza y resistencia a la corrosión.

Además, el guardapolvos que cubre el perno y la carcasa debe estar firmemente sellado a estos con anillas de acero para muelles del diámetro adecuado para una instalación fija en la carcasa y un movimiento suave entre el perno y la tapa del guardapolvos (inclinación y rotación del perno). Asimismo, el interior del guardapolvos tiene muescas para evitar que el agua se filtre. Las rótulas de Sidem son muy resistentes al agua gracias a una combinación de múltiples factores.

Otro motivo clave de los fallos es el uso de lubricante de mala calidad. Así, emplear un lubricante de buena calidad es esencial, ya que funciona como una capa protectora en todas las superficies vulnerables. Además, un buen lubricante mantiene su composición y sus características, que evitan que se seque, se erosione y finalmente falle.

Conducción cómoda

La grasa de Sidem hace que las rótulas, los extremos de barra de acoplamiento, los estabilizadores y las rótulas axiales estén lubricados para una conducción muy cómoda durante mucho más tiempo. La grasa semisintética reduce la fricción, tanto estática como dinámica, lo que evita el movimiento de deslizamiento a sacudidas al absorber los pares de arranque y de rotación.

Gracias a determinados aditivos, la grasa se adhiere mejor a los componentes, ya sean de acero o de plástico (cojinetes de polímero). Como resultado, la grasa funciona durante un periodo más largo de tiempo y proporciona un mejor efecto amortiguador entre los componentes en contacto.

Diseño fruto de la colaboración

El lubricante de Sidem es el resultado de la colaboración del departamento de I+D de Sidem y Klüber Lubrication. Las piezas de dirección y de suspensión están expuestas a duras condiciones en el uso diario (torsión de pares, temperaturas, condiciones climáticas).

Por tanto, hubo que someter a distintos tipos de lubricantes a pruebas intensivas en los laboratorios de Sidem antes de encontrar la solución perfecta para garantizar la mayor vita útil posible.

Por último, pero no por ello menos importante, la grasa no contiene metales pesados ni lubricantes sólidos negros, lo que la hace ser todavía más duradera.

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